Viernes intenso en Bucarest, asistiendo a la clase de inglés de Irina donde han diseñado su ciudad ideal en compañía de los alumnos de 5º de Primaria. Por la tarde, hemos hecho un tour guiado por el Palacio del Parlamento, donde tan solo hemos podido ver un 2% del total del edificio. Ha sido alucinante ver la inmensidad del monumento, con pasillos interminables, escaleras infinitas y enormes lámparas de techo. Después, hemos conocido el otoño en todo su esplendor paseando por el parque Cismigiu. Para finalizar el día, hemos ido al Museo de los Sentidos donde nos hemos perdido por sus laberintos de espejos, su túnel infinito, su cama de clavos, así como el resto de las innumerables salas. Un día que ha merecido muchísimo la pena.
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